Muy buenas a todos, para empezar queríamos hablar
sobre el futurismo, lo que para nosotros no solo es un movimiento de los
conocidos como "vanguardistas", es una auténtica forma de de ver la
vida en todos sus ámbitos.
El futurismo fue uno de los primeros movimientos
de las corrientes de vanguardia de principio del siglo 20. Fue fundado en
Italia por el poeta Filippo Tommaso Marinetti, más concretamente en Milán.
Influyó en la literatura, la pintura, el teatro,... no puede decirse que su
influencia fuese escasa. El futurismo buscaba romper con la tradición y el
pasado. Consideraba como elementos principales a la poesía, el valor, la
audacia y la revolución; alentaba la agresividad, la irracionalidad, la
impulsividad, etc. Tenía como postulados la exaltación de lo sensual, lo
nacional y guerrero, la adoración de la maquina, el retrato de la realidad en
movimiento, lo objetivo de lo literario y la disposición especial de lo
escrito, con el fin de darle una expresión plástica.
Rechazaba la estética tradicional e intentó
ensalzar la vida contemporánea, basándose en sus dos temas dominantes: la
máquina y el movimiento. Se recurría, de este modo, a cualquier medio expresivo
(artes plásticas, arquitectura, urbanismo, publicidad, moda, cine, música,
poesía) capaz de crear un verdadero arte de acción, con el propósito de rejuvenecer
y construir de nuevo la faz del mundo.
En 1909, el ya mencionado Marinetti recopiló y
publicó los principios del futurismo en un manifiesto. Al año siguiente los
artistas italianos Giacomo Balla, Umberto Boccioni, Carlo Carrá, Luigi Russolo
y Gino Severini firmaron el "Manifiesto de los pintores futuristas".
En el ámbito de la pintura, el futurismo se
caracterizó por el intento de captar la sensación de movimiento. Para ello
superpuso acciones consecutivas, una especie de fotografía estroboscópica o una
serie de fotografías tomadas a gran velocidad e impresas en un solo plano.
Ejemplos destacados son el Jeroglífico dinámico de Bal Tabarin (1912,
Museo de Arte Moderno, Nueva York) y el Tren suburbano (1915, Colección
Richard S. Zeisler, Nueva York), ambos de Gino Severini. En el campo de la
fotografía destacaron los hermanos Bragaglia y sus imágenes movidas, que
ofrecen tiempos sucesivos y trayectoria de los gestos, como en Carpintero
serrando o en Joven meciéndose.
En 1914 se presentaron también los primeros
dibujos sobre una ciudad moderna de Antonio Sant'Elia y Mario Chiattone.
Sant'Elia presentó ese mismo año su Manifiesto de la arquitectura futurista,
un proyecto utópico que cristalizó en las imágenes de la Ciudad Nueva: la nueva
medida ya no era el edificio, sino la estructura urbana, y apostaba, además,
por las nuevas tipologías, como estaciones de trenes y aeroplanos, centrales
eléctricas, casas escalonadas con ascensores… Se trataba de un nuevo mundo
vertical y mecánico, conectado a través de redes de ascensores de hierro y
cristal.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhF814EE1Wi-OHtcPBVwNrvDzb_TsfIqOGIfyjDt-3fxLulnfQyscG_jUqd52icJqGa2PYrvrgHejzG4tKt9aJ6Z3f8x0aEOo72Y_YCCzB0RyzB2gOaFPvn4mtDzY9yqnNoTdnGPQqYv2gv/s320/Sant%2527Elia+04%255B1%255D.jpg)
En la literatura, el futurismo abjura
completamente del pasado y alienta a no respetar la métrica. Asimismo, intenta
sustituir los nexos por notaciones algebraicas y buscar un léxico radicalmente
hecho de tecnicismos y barbarismos, plagado de infinitivos, exclamaciones e
interjecciones que denotan energía y libertad.
El llamado teatro sintético del futurismo
es el espacio en el cual las acciones ocurren a una velocidad vertiginosa, con
tramas de no más de diez minutos, y donde se ocultan las presencias humanas, y
sólo se ven los pies de los actores, cuyas figuras se adivinan por metonimia.
La estética futurista pregona una ética, de raíz
fundamentalmente machista, misógina y provocadora. Entre sus postulados se
dignifica la guerra como una fórmula para el saneamiento de un mundo anacrónico
y decrépito, y proscribe la argumentación sentimental o anecdótica.
El futurismo fue un movimiento fundamentalmente
italiano y de carácter literario, aunque tuvo expresiones importantes en la
plástica . También tuvo adherencias en otras manifestaciones artísticas, en
arquitectura y en la música (el ruidismo del compositor Luigi Russolo,
antecedente directo de la llamada música concreta).
Los más notables seguidores del futurismo en
otros países se encuentran en Rusia (como el poeta Vladimir Majakovski), en
Bélgica (el escritor Émile Verhaeren), en Portugal (el editor Fernando Pessoa),
en España (el poeta Joan Salvat-Papasseit). En Sudamérica tuvo también algunos
seguidores, principalmente en Buenos Aires y Montevideo, tales como Alberto
Hidalgo y Juan Parra del Riego.
La importancia que tuvo el futurismo, más allá de
sus méritos artísticos, consistió en crear una estética desde cero, con lo que
se hizo posible una profunda renovación de las técnicas y principios
artísticos, cuyas repercusiones aún se sienten. Fue uno de los primeros
"ismos" o vanguardias artísticas, y su valor como movimiento de
ruptura allanó el camino a otras corrientes que refrescaron el panorama
artístico en los albores del siglo XX.
El decálogo de la arquitectura es el siguiente:
1. El reinado de la arquitectura estática se ha acabado definitivamente, nosotros iniciamos el reinado de la arquitectura dinámica.
2. Las líneas de la arquitectura moderna deben comunicar su entusiasmo por la carrera y el vuelo.
3. La casa del futuro será independiente, transportable, desmontable, mecánica, divertida.
4. Las formas cúbicas deben desaparecer de las construcciones arquitectónicas.
5. Ritmo y simetría no son esenciales para la arquitectura.
6. Todos y cada uno de los elementos de la casa moderna deberán tener autonomía e independencia propias.
7. La casa futurista no tendrá fachada.
8. La casa futurista tendrá todas las tonalidades del arco iris.
9. La apariencia externa de la casa la determinará su aplicación práctica.
10. Borraremos de las paredes de nuestras habitaciones toda marca y todo recuerdo del pasado.
Y para el final, nos dejamos lo más interesante,
y esencial para comprender el futurismo, su manifiesto creado por el ya
mencionado Marinetti:
1.Queremos
cantar el amor al peligro, el hábito de la energía y de la temeridad.
2.El coraje, la audacia, la rebelión, serán
elementos esenciales de nuestra poesía.
3.La literatura exaltó, hasta hoy, la inmovilidad
pensativa, el éxtasis y el sueño. Nosotros queremos exaltar el movimiento
agresivo, el insomnio febril, el paso de corrida, el salto mortal, el cachetazo
y el puñetazo.
4.Nosotros afirmamos que la magnificencia del
mundo se ha enriquecido con una nueva belleza, la belleza de la velocidad. Un
coche de carreras con su capó adornado con gruesos tubos parecidos a serpientes
de aliento explosivo... un automóvil rugiente, que parece correr sobre la
ráfaga, es más bello que la Victoria de Samotracia.
5.Queremos ensalzar al hombre que lleva el
volante, cuya lanza ideal atraviesa la tierra, lanzada también ella a la
carrera, sobre el circuito de su órbita.
6.Es necesario que el poeta se prodigue, con
ardor, boato y liberalidad, para aumentar el fervor entusiasta de los elementos
primordiales.
7.No existe belleza alguna si no es en la lucha.
Ninguna obra que no tenga un carácter agresivo puede ser una obra maestra. La
poesía debe ser concebida como un asalto violento contra las fuerzas
desconocidas, para forzarlas a postrarse ante el hombre.
8.¡Nos encontramos sobre el promontorio más
elevado de los siglos!... ¿Porqué deberíamos cuidarnos las espaldas, si
queremos derribar las misteriosas puertas de lo imposible? El Tiempo y el
Espacio murieron ayer. Nosotros vivimos ya en el absoluto, porque hemos creado
ya la eterna velocidad omnipresente.
9.Queremos glorificar la guerra –única higiene
del mundo– el militarismo, el patriotismo, el gesto destructor de los
libertarios, las bellas ideas por las cuales se muere y el desprecio de la
mujer.
10.Queremos
destruir los museos, las bibliotecas, las academias de todo tipo, y combatir
contra el moralismo, el feminismo y contra toda vileza oportunista y
utilitaria.
11.Nosotros cantaremos a las grandes masas
agitadas por el trabajo, por el placer o por la revuelta: cantaremos a las
marchas multicolores y polifónicas de las revoluciones en las capitales
modernas, cantaremos al vibrante fervor nocturno de las minas y de las
canteras, incendiados por violentas lunas eléctricas; a las estaciones ávidas,
devoradoras de serpientes que humean; a las fábricas suspendidas de las nubes
por los retorcidos hilos de sus humos; a los puentes semejantes a gimnastas
gigantes que husmean el horizonte, y a las locomotoras de pecho amplio, que
patalean sobre los rieles, como enormes caballos de acero embridados con tubos,
y al vuelo resbaloso de los aeroplanos, cuya hélice flamea al viento como una
bandera y parece aplaudir sobre una masa entusiasta. Es desde Italia que
lanzamos al mundo este nuestro manifiesto de violencia arrolladora e
incendiaria con el cual fundamos hoy el FUTURISMO porque queremos liberar a
este país de su fétida gangrena de profesores, de arqueólogos, de cicerones y
de anticuarios. Ya por demasiado tiempo Italia ha sido un mercado de
ropavejeros. Nosotros queremos liberarla de los innumerables museos que la
cubren por completo de cementerios.
Personalmente estamos de acuerdo en todo lo que
este manifiesto dice exceptuando un punto: el desprecio a la mujer, hay que
tener en cuenta el momento en que fue redactado, tan distinto al actual. ¡Hasta
la próxima!
Hola!!! He entrado por casualidad buscando información sobre este movimiento y no sé si mantendréis todavía el blog. Es genial como habéis recopilado la información, de manera simplificada y con ejemplos de todas las artes. Muchas gracias!!!
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